Muchos de nosotros hemos estado involucrados con evaluaciones de desempeño en nuestra vida laboral y pensamos que son impersonales, subjetivas y punitivas. Muchas veces la administración de estos procesos fue complicada, burocrática e ineficaz. Me gustaría presentarte algunas reflexiones sobre cómo puedes utilizar las evaluaciones de desempeño para cambiar positivamente el comportamiento dentro de tu negocio.

Esta semana quiero presentarte una rutina con un enfoque estructurado para proporcionar una retroalimentación constructiva. Muchos dueños de negocios utilizan un método al azar para aplicar las revisiones de desempeño y destinan pocos minutos de su apretada agenda para reunirse con sus empleados. El encuentro no es planeado de antemano, la discusión no se piensa, y el empleado a menudo se sorprende por lo que oye, mientras el jefe sale de la reunión contento de que por fin ha terminado.

Este intento de acortar el proceso, sólo elimina los elementos críticos que deben estar presentes en todos los sistemas de evaluación del desempeño y no funciona para crear un cambio positivo en el negocio.

Tu desafío esta semana será establecer los fundamentos de tu proceso de evaluación de desempeño. Para hacerlo aplicaremos un sencillo método:

Paso 1 – Establecer las normas de trabajo – Medir lo que el individuo ha logrado. Para hacerlo es tan sencillo como definir 3 niveles diferentes de rendimiento en el trabajo: Superior, Que se espera y Debajo de las expectativas. (Puedes agregar otros niveles si necesitas más grados de separación).
Paso 2 – Establecer las normas de comportamiento – Medir cómo funciona y cómo se realiza. Una vez más, esto es tan sencillo como definir 3 niveles diferentes de trabajo en equipo y comportamientos: Superior, Que se espera y Debajo de las expectativas.
Paso 3 – Escribe una descripción del rendimiento en tus propias palabras, tanto para el paso 1 como para el paso 2.

Paso 4 – Comparte tus normas y las descripciones de cada una con tu equipo. Ellos deben saber cuáles son las normas que se están midiendo y sus consecuencias.

Paso 5 – Determina la frecuencia con que vas a proporcionar esta información a los miembros de tu equipo. Como mínimo debería ser anual y ojalá cada 6 meses.

Paso 6 – Asigna un horario de 30-45 minutos con cada uno de los miembros de tu equipo para discutir sus resultados. Permíteles dar una auto-evaluación basada en los criterios y descripciones. Aprovecha esta oportunidad para discutir lo que necesitan para mejorar su rendimiento y comportamiento en los próximos 6 meses.

No es necesario hacer algo más complicado que esto. Se requiere algo de trabajo previo y planificación y luego si quieres puedes agregar una estructura y documentación más completa. Por ahora, lo importante es empezar.

Las personas de tu equipo quieren saber cómo lo están haciendo y cómo pueden mejorar. Dales la mejor oportunidad para tener éxito.