Muchas personas sueñan con tener un negocio propio para ser tu propio jefe, pero esto conlleva grandes responsabilidades. Desarrollarte personalmente, obtener excelentes ingresos y construir tú propio negocio o empresa es algo que disfrutan muchos.

Lo cierto es, que esto tiene sus ventajas y desventajas, es importante conocerlas para tomar la decisión de abrir un negocio o no.

Ventajas y Desventajas de ser tu propio jefe

Cuando se quiere comenzar un negocio desde cero, puede que sea exitoso o no, ya que al principio de todo negocio las cosas no pueden fluir como se desea. Pero, a medida que pasa el tiempo las cosas pueden mejorar.

Para ser tu propio jefe tienes que ser responsable, tener dedicación, investigación, paciencia, cumplimiento, pasión y esfuerzo. Te enseñaremos las ventajas y desventajas para que estés preparado a la hora de abrir un negocio propio, estas son:

Ventajas de ser tu propio jefe

La principal razón del por qué muchos desean ser tu propio jefe es la libertad de tomar decisiones y escoger las horas de trabajo. Estas son otras cosas beneficiosas de tener un negocio independiente:

Tomas tus propias decisiones

Se siente gratificante cuando se pueden tomar las decisiones que uno desea, hacer indicaciones o tomar el riesgo en algunas cosas. Muchos quieren poseer el trabajo y sentir una satisfacción laboral, y cuando eres tu propio jefe, lo sientes.

Al no tener que pedir permiso a nadie ni dar explicaciones en nada, significa mucho para una persona. Esto va acompañado del tipo de personalidad que tiene la persona, ya que se sienten más seguros cuando están dirigiendo. Esto aplica en los negocios.

Fijar tus horas

Cuando eres tu propio jefe puedes colocarte el horario que deseas, si eres un madrugador o no deseas trabajar en el transcurso de la tarde porque quieres pasar más tiempo con tus hijos, o quieres hacer tus actividades o simplemente te gusta trabajar por ratos.

Ser tu propio jefe te permite eliminar la necesidad de calentar una silla por las horas requeridas y cumplir el horario estricto. Solo te haces responsable de la producción, no de las horas.

Creas tu estilo de trabajo

Algo que importa mucho es el ambiente de trabajo y el equipo de trabajo, si puedes tenerlo. Tu personalidad cuenta mucho para ser tu propio jefe. Algunas personas son más hábiles con la tecnología, así que la organización y ubicación en un negocio son importantes.

Es recomendable que el dueño del negocio tenga una página web para que pueda cumplir con el desarrollo de los productos, estar al día con los pagos y las finanzas.

Además, hay muchas decisiones que dependen de ti, por ejemplo, si deseas un escritorio, café en la cocina, un internet rápido o tener una buena vista en tu oficina.

Tú escoges la ubicación

Tú eliges el lugar donde deseas empezar tu negocio, no importa donde sea. Puedes decidir si comenzar el negocio en una área cerca de tu casa o en una ciudad diferente para viajar todos los días a ella.

Si deseas ganar dinero trabajando por internet o desde casa puedes conocer gente en  Starbucks o viajar todos los días hasta allá, como tú eres el jefe, tú decides.

Desventajas de ser tu propio jefe

Sin embargo, no todo es perfecto cuando eres tu propio jefe, ya que algunos factores como la salud, la industria del trabajo y los clientes pueden intervenir en las horas que tengas libres. Estas son algunas desventajas:

Los clientes pueden convertirse en tus jefes

Cuando se comienza un negocio es posible que se terminen planeando algunas cosas por la noche, cuando ya estás cansado y sabes que debes levantarte temprano al día siguiente.

Dependiendo del negocio que tengas, los clientes pueden quedar al mando, es decir, que ajustas el horario a los distintos tipos de clientes.

La salud del negocio no siempre es la mejor

Ser tu propio jefe no quiere decir que puedes faltar a compromisos, ya que tu palabra es el activo más poderoso. Para ser exitoso debes cumplir con esos compromisos, en la medida de lo posible.

Normalmente, esos compromisos son con los vendedores, actividades de negocios y los aliados, ya que ellos pasarían a ser tus jefes. Las promesas, las reuniones y los plazos son compromisos y no se puede dirigir o existir un negocio sin ellos.

Dependes de los empleados

Los empleados son en alguna forma tus jefes, al tener tu negocio eres el líder, pero el liderazgo implica algunos sacrificios. Esto significa que dependes de tus empleados para hacer crecer el negocio, ya que no puedes pedir menos de lo que das.

Si tú, sales temprano, tus empleados también salen temprano, y si das poco, tus empleados también te darán poco. Este es el factor de liderar un negocio.

Cubres todos los gastos del negocio

Como tú eres el jefe, todo sale de tu presupuesto, no del de los empleados. Esto significa algunos beneficios como bonos, salud médica y viajes pagados por ti. Además, cuando se atraviesa por momentos críticos, debes saber cómo administrarte para poder sacar el negocio adelante y a tus empleados.

No todo el mundo tiene el perfil para tener un negocio propio, ya que requiere de mucho trabajo, tiempo y un fuerte esfuerzo.